El agrónomo del Servicio de Investigación Agrícola Theodore Webster, en la Unidad de Investigación de la Protección y el Manejo de Cosechas, mantenida por ARS en Tifton, Georgia, ha descubierto que esta maleza tropical (Commelina benghalensis L.) emerge más tarde en la temporada de crecimiento que la mayoría de malezas. Esto significa que sembrar el algodón más temprano podría darle a la cosecha una ventaja antes de que la maleza comience a crecer.
Webster y sus colegas—Michael Burton de la Universidad Estatal de Carolina del Norte; Stanley Culpepper, Tim Flanders y Tim Grey de la Universidad de Georgia; y Barry Brecke de la Universidad de la Florida—observan los avances de la maleza y trabajan para comprender su biología. Según Webster, la razón principal de por qué esta maleza tropical ahora es una plaga seria es relacionada con los cambios recientes en los sistemas de labranza y de producción.
Un tal cambio es la utilización extensa de los cultivos "Roundup Ready", los cuales pueden tolerar el herbicida. Esto ayuda a los cultivadores a manejar mejor las malezas en el algodón y aumenta el uso de la labranza de conservación. Pero la maleza Santa Lucia tiene una resistencia natural al glifosato, el cual es el ingrediente activo en Roundup. Según Webster, la maleza también tolera otros herbicidas comunes, y los herbicidas que son los más eficaces en controlar la maleza también aumentan considerablemente los costos de producción.
Nativo de África y Asia sureño, esta maleza fue observada por primera vez en la Florida en 1928. Es única en el mundo de plantas porque produce flores arriba del suelo y también debajo, y ambos tipos forman semillas. Gradualmente se extendió a Georgia, pero no fue considerada molestosa allí hasta 1999, según Webster. Campañas anuales de control ahora le cuesta al sector de algodón de Georgia más de 1,2 millones de dólares.
En Georgia, sembrar algodón en abril y temprano en mayo podría ayudar a controlar la maleza. Típicamente, el algodón se siembra tarde en mayo y en junio, el tiempo más tarde que se puede sembrar algodón en Georgia sureño.
Por Sharon Durham – ARS-USDA