A través de un comunicado, expresaron que: “el tributo, que abarca para su cálculo el capital de trabajo, los bienes de cambio, la maquinaria y los equipos, constituye un duro golpe para el sector agropecuario y las pymes porque compromete sus activos desalentando las inversiones y la generación de empleo. Asimismo expresamos nuestra profunda decepción por la decisión de los legisladores del oficialismo cordobés de avalar este nuevo impuesto que no es coparticipable, al igual que otro tributo confiscatorio como los derechos de exportación”.
Remarca que, de esta manera, “Córdoba incrementará su extraordinaria transferencia de recursos al Estado Nacional, mientras sigue siendo una de las que menos coparticipación per cápita recibe, alejándose del federalismo y asignándole aún más manejo discrecional al poder central”.
Finalmente, el comunicado también hace referencia a las desventajas que este tipo de decisiones ocasionan en el sector: “En el marco de esta agobiante e insostenible presión tributaria, también preocupa fuertemente la decisión del Gobierno de la Provincia de aumentar un 40 por ciento promedio el Impuesto Inmobiliario Rural. Todo esto ubica al productor argentino en desventaja competitiva con los de otros países, que para fomentar una mayor producción e ingreso de divisas bajan impuestos y otorgan créditos accesibles”.