Digitalizan las cartas de suelos en la provincia de Buenos Aires
Fueron elaboradas por el INTA a partir de las cartas de suelos originales de la provincia y son una herramienta imprescindible para la toma de decisiones y la proyección productiva.
Fueron elaboradas por el INTA a partir de las cartas de suelos originales de la provincia y son una herramienta imprescindible para la toma de decisiones y la proyección productiva.
Al incluir la vicia como cultivo de cobertura, recuperaron 8 hectáreas en un campo alquilado en Centeno (Santa Fe). Además, les permite controlar malezas y obtener un buen aporte de nitrógeno y materia orgánica al suelo.
Desde el INTA ponderan la necesidad de ordenar el manejo ganadero de acuerdo a las características heterogéneas del pastizal. Esto permite un uso más eficiente de los recursos, reduce el uso de insumos químicos y brinda mayor estabilidad económica a la empresa. El caso exitoso del Establecimiento “La Emma” en Pipinas, Cuenca del Salado, Buenos Aires.
La técnica aumenta el rendimiento del maíz al favorecer una mayor disponibilidad de agua y nutrientes, según ensayos elaborados desde la FAUBA. Sin embargo, se la debe usar eventualmente y no reemplaza el buen manejo del recurso. En soja, también permitió mejorar rendimientos.
Productores agropecuarios comprometidos con la salud del suelo, estudiaron el impacto de realizar rotaciones diversas e intensificadas y encontraron impactos positivos y contundentes sobre la captura de carbono.
El mapa indica que de 0-30 centímetros de profundidad hay 770.403 kilómetros cuadrados de suelos salinos, sódicos o salinos-sódicos, lo que representa el 27,6 % de la superficie del país, y de 30-100 centímetros de profundidad hay 1.066.389 kilómetros cuadrados, lo que representa el 38,2 %. Los detalles, en un inventario realizado de manera conjunta entre la FAUBA e INTA.
Aumenta el riesgo de erosión eólica en el suroeste de Córdoba, ¿cómo son los vientos en esta zona? ¿Qué nos dejó la campaña anterior? ¿Qué acciones podemos llevar a cabo para revertir procesos de erosión eólica?
El suelo constituye un reservorio terrestre de carbono, variando su magnitud a lo largo del territorio. Se estima que al 2040 la pérdida de carbono orgánico puede llegar a 1700 kilos por hectárea. Secuestrar carbono con buenas prácticas de manejo que incrementen los niveles de materia orgánica del suelo implica entrar en un círculo virtuoso para la sustentabilidad del sistema productivo.
Un estudio de larga duración, realizado por especialistas del INTA Paraná, determinó que el agregado de fósforo en diferentes secuencias de cultivos puede aumentar su disponibilidad y reciclaje, dependiendo del tipo de suelo. El ensayo, que reúne datos de más de ocho años de trabajo, brinda información útil para desarrollar estrategias de fertilización con fósforo para secuencias de cultivo.
Se trata de Las Perdices, y el número 39 en todo el territorio provincial. Los integrantes firmaron el acta de constitución con el Ministerio de Agricultura y Ganadería.