La forrajera que se adapta a climas templados-fríos y es capaz de tolerar estrés hídrico
Se destaca además por su alto contenido de energía y de producción de kilogramos de materia seca por hectárea, lo que permite mantener altas cargas de alimentación y ganancias de peso diarias en regiones con pasto de baja calidad en sistemas de engorde a corral.