Por este y otros motivos, se requiere de la aplicación de fertilizantes.
Con el objeto de evaluar la respuesta del trigo y el efecto residual sobre la soja, a la aplicación de distintas fuentes, dosis y combinaciones de N y S, el INTA Rafaela –Santa Fe- realizó ensayos durante las 5 últimas campañas, en un lote representativo de la región, sometido al doble cultivo trigo-soja desde 1992. La fuente de N fue urea, la de S sulfato de calcio y la combinada sulfato de amonio. Las dosis utilizadas fueron 0, 12, 24, 36 y 48 kg/ha de N; 0, 14, 28, 41 y 55 kg/ha de S, y 0/0, 12/14, 24/28, 36/41 y 48/55 de N y S.
La aplicación de urea no tuvo efecto en trigo ni en soja, probablemente debido a que el suelo se encontraba bien provisto de N. Los mejores resultados en trigo se lograron con sulfato de amonio y sulfato de calcio, que produjeron mejores respuestas con el incremento de las dosis, pero no modificaron el rendimiento cuando se aplicaron por separado. Según estos resultados, es posible realizar el doble cultivo trigo-soja y sostener los rendimientos de ambos, combinando la práctica de la siembra directa con el uso adecuado de fertilizantes.
Informes: Ings. Oscar Keller y Hugo Fontanetto, INTA Rafaela (03492) 440118/121/123, urafaela@rafaela.inta.gov.ar, hfontanetto@rafaela.inta.gov.ar