Aproximadamente unas 955.000 ha de soja ya se sembraron en el centro-norte de la provincia de Santa Fe, donde en el caso del cultivo de soja temprana, a medida que las temperaturas aumentaron, el ritmo de siembra disminuyó y se paralizó.
Por su parte, durante los últimos días, el maíz temprano fue uno de los cultivos de la cosecha gruesa que mostró los impactos de la ausencia de precipitaciones, las que se sumaron a los eventos anteriores – escasas lluvias, heladas, vientos – desde su inicio, evidenciando así síntomas y respuestas dispares, según el estado fenológico de cada uno de los lotes, situación con presente incierto y con muchos interrogantes por los futuros resultados.
En este contexto, desde la el reporte de estimaciones agrícola que elaboran conjuntamente la Universidad Católica de Santa Fe y la Bolsa de Cereales provincial, se señaló que “en los lotes del maíz temprano muy afectados, comenzaron las tareas de picado/embolsado, para autoconsumo del ganado”.
Estado del girasol
El informe relevó también la situación del cultivo en la provincia. Se destaca que “las altas temperaturas, falta de lluvias y a comienzos de noviembre, bajas temperaturas y heladas, provocaron el secado de las hojas basales y el lento deterioro de las plantas.
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