Al cierre del año pasado, las precipitaciones, en los alrededores de San Francisco, fueron de 488 milímetros, de los casi 900 milímetros que estábamos acostumbrados a recibir.
En la tabla 1 se presenta la manera en que distribuyó dicho milimetraje.
Tabla 1: Distribución de lluvias año 2022, información facilitada por el Tco. Agr. Gustavo Narbona (IPEA N° 222, San Francisco)
En lo que va de enero, mes en el que suele llover alrededor de 120 mm, llevamos acumulados entre 40 y 90 mm (según https://clima.bccba.org.ar/) entre las diferentes localidades del departamento. Sin dudas, esto genera una gran variabilidad de escenarios. Lo cierto es que los cultivos siguen sufriendo la falta de agua y los fuertes calores en muchos lugares.
SI bien esta situación de sequía se viene revirtiendo lentamente en diferentes zonas de la provincia, nuestro departamento en particular, junto a otros que integran la cuenca lechera cordobesa, siguen en situación crítica. Así lo indica la figura 1, que muestra el índice verde (NDVI) para la primera quincena de enero de 2023 comparada con lo sucedido en el mismo periodo, entre los años 2000 y 2022. Este índice representa la fracción de energía solar que es absorbida por las plantas, existiendo una fuerte relación entre este índice y la biomasa, el índice de área foliar (IAF) y la productividad.
Figura 1: Situación relativa de la vegetación – NDVI, entre el 1 y 16 de enero de 2023 vs 01 al 16 de enero del periodo 2000-2022.
Como puede observarse en la imagen anterior, el color azul indica que la vegetación se encuentra en ese periodo igual al promedio de la serie analizada (podemos decir condición normal), mientras que las zonas con colores amarillos indican que están por debajo del promedio. Las zonas de color rojo, indican que los valores de este índice están por debajo de los valores mínimos encontrados para ese periodo de tiempo.
Dicho de otra forma, estamos en la peor condición de los cultivos producto de la sequía y evidenciada por el índice verde de los cultivos, al menos en este periodo de veintidós años (2000-2022).
La pregunta es: ¿cómo y cuánto va a impactar esta situación sobre los ingresos que el departamento San Justo recibe por la producción agropecuaria, en esta campaña (trigo 2022, soja y maíz 2023)?
Para dar respuesta a este interrogante, buscamos información sobre la producción total de granos y leche producida en el Departamento, la que se presenta mediante los siguientes datos
Producción de los principales cultivos expresada en toneladas (promedio de las últimas 5 campañas) y producción de leche (estimada para el 2022).
Maíz* 1.684.590 toneladas
Soja* 1.437.665 toneladas
Trigo* 609.640 toneladas
Leche* 1.423.500.000 litros
*Fuente https://www.magyp.gob.ar/sitio/areas/estimaciones/
A estos valores, los vinculamos con los precios de mercado de cada uno de los productos, los transformamos en dólares y lo obtenido se presenta en la figura 2.
Figura 2: Ingreso bruto al departamento San Justo expresado en dólares (cotización BNA 20/1/23)
En la figura anterior, se puede observar el aporte porcentual que cada producto realiza a los ingresos del departamento: la Soja aporta el 36 %, el Tambo el 29 %, el Maíz el 24 % y el Trigo el 11%. Vale aclarar que solo se considera el eslabón productivo primario de cada cadena.
En base a nuestras observaciones y a lo expresado por referentes locales y con el fin de realizar el ejercicio para una “aproximación teórica”, asumimos que, a nivel departamental, el trigo presentó una reducción del 60 %, la soja estimamos que estará alrededor del 40 %, mientras que el maíz estará en el orden del 50 %. En cuanto al tambo, se espera una reducción del 30 % en los volúmenes producidos, debido a múltiples causas.
Los resultados de este análisis se presentan en la figura 3, que muestra el impacto, en términos de reducción del ingreso bruto, por producto y de qué manera afecta a los ingresos para la actual campaña.
Figura 3: Reducción del ingreso bruto por efectos de la sequía
Como vemos, la situación es crítica. De acuerdo a nuestros cálculos, estaríamos frente a una merma de casi el 50 % de los ingresos que el Departamento suele recibir en conceptos de producción agropecuaria.
La pregunta que inmediatamente se nos viene a la mente es ¿dónde va a impactar esta reducción de ingresos? Compartimos algunas ideas…
-Menos inversiones (productivas y no productivas)
-Reducción de paquetes tecnológicos (menor utilización de insumos)
-Compra de insumos a plazo (mayores costos)
-Reprogramación de deudas comerciales y no comerciales (mayores costos)
-Retraso en el pago de impuestos y adhesión a moratorias
-Renegociación de alquileres
-Movimientos inmobiliarios por abandono de campos de menor aptitud
-Problemas y demoras en la cadena de pagos
-En resumen, menor dinero circulando por el departamento
Comentarios finales
Este fue un ejercicio teórico, basado en supuestos. Sabemos que, hacia adelante, se pronostican lluvias que pueden hacer reducir levemente las pérdidas en maíces y sojas de segunda, pero no mucho.
Para el caso del tambo, se espera que se puedan confeccionar las reservas necesarias en cantidad, aunque lamentablemente la calidad de los silos este año, entre lo que ya se hizo y lo que se va a hacer, viene supeditada al contenido de grano de los mismos, los de primera con casi nada de grano y los de segunda, ya veremos.
Otro factor es la relación de precios para nada favorable, entre el precio de la leche y el de los granos/subproductos, aspecto por demás importante para definir la estrategia a asumir por el productor en los meses de otoño e invierno principalmente. Por otro lado, el tema de continuar o no con la actividad, este es un tema que muchos productores lecheros están analizando.
Material generado por Ing. Agr. (M Cs) Alejandro Centeno. Jefe de INTA AER San Francisco. Tel. 03562-568534 – Email: Email: centeno.alejandro@inta.gob.ar y la Ing. Agr. Graciela Gasparetti, profesional de INTA AER San Francisco. Email: gasparetti.graciela@inta.gob.ar
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