Lo hizo a través de la Resolución 128/2023 que fue publicada en el Boletín Oficial y que incluye unas 1700 posiciones arancelarias.
Las producciones incluidas, según publicó la agencia NA, son: pesca, limón, legumbres, miel, ajo, tabaco, te, ciruela, arándano, cereza, frutas secas, olivicultura, maní, vino, forestales, girasol confitero, lana, jojoba, productos orgánicos concentrados proteicos, maíz pisingallo
Desde la Secretaría de Agricultura adelantaron que se siguen los trabajos de análisis y que «en los próximos días se incluirán y se publicarán los anexos correspondientes».
Esta norma también fijo las condiciones para que los productores puedan participar de este programa: a) haber exportado en algún momento de los 18 meses anteriores, b) mantener o incrementar durante la vigencia del programa la cantidad de puestos de trabajo, c) asumir el compromiso de volcar al mercado local y mantener o incrementar los volúmenes de abastecimiento, d) cumplir los acuerdos de precios para el mercado local que fije la Secretaría de Comercio.
La publicación de esta resolución complementa el decreto que estableció el tipo de cambio preferencial, principalmente, para las exportaciones de cereales.
Entre los considerandos, el gobierno sostuvo que la medida es necesaria porque en “el transcurso del presente año el país se ve afectado por la mayor sequía de sus últimos años, afectando el rendimiento de los cultivos agrícolas, que causaron pérdidas en la producción agropecuaria y sus industrias derivadas”.
Añadió que “se vieron afectados por las severas condiciones climáticas muchos otros productos agroindustriales, por lo que resulta necesario incluir en este Programa a aquellos derivados de las Economías Regionales con el objetivo de contrarrestar ese impacto negativo”.
Asimismo agregó que “a través de estos programas de estímulo se busca promover el arraigo territorial, el agregado de valor, la industrialización en origen, el incremento de las exportaciones a través del desarrollo socioeconómico armónico entre los distintos eslabones de las cadenas de valor de las Economías Regionales”.