En el caso del cultivo de girasol, la regularidad de las precipitaciones, generaron condiciones favorables para el ciclo del girasol, que evolucionó sin inconvenientes y sus estados, bueno a muy bueno, se mantuvieron o mejoraron. En las últimas jornadas del período se observó en los distintos lotes, particularmente en las más bajos, encharcamientos y/o anegamientos.
Se constató la presencia de aves, principalmente palomas, que afectaron y afectarían a la oleaginosa en sus etapas de floración y fructificación.
En la foto de portada puede verse una “torta” de girasol; con capítulo dañado por la presencia de cotorras y palomas, en el centro del departamento General Obligado.
Las condiciones ambientales de la semana comprendida entre el 29 de noviembre y el 5 de diciembre de 2023, en el centro norte santafesino, según cada zona geográfica fueron muy heterogéneas, irregulares y variables, por lo que influyeron directamente sobre las diferentes actividades y condicionaron la evolución de los sembradíos.
Las características ambientales regularon la cosecha de trigo y la siembra de la cosecha gruesa 2023-2024, por lo que se optimizó cada hora en la concreción de las planificaciones y los objetivos, debido a que, al prorrogarse las fechas de implantación, traerían aparejado la opción de nuevas estrategias o el cambio por otro cultivo, que aumentarían los costos agrícolas.
El informe semanal del SEA, que difunde la Bolsa de Comercio de Santa Fe, señala que en cuanto a la soja temprana, se llevan implantadas unas 840.000 hectáreas, el 92 por ciento de la intención de siembra de esta oleaginosa que es de 1.050.000 ha.
A los cultivares de maíz temprano, tanto para los sembrados en la primera etapa, principalmente en el noreste del SEA, como para los de la segunda etapa, en el resto del área, se los observó en muy buen estado y se desarrollaron sin inconvenientes.
En particular, en algunos sectores de los departamentos San Martín, San Jerónimo, centro sur de Castellanos y Las Colonias se inició la siembra de soja tardía (de segunda), con excelente disponibilidad de agua útil en los perfiles de suelos.
Se estimó una intención de siembra de alrededor de las 600.000 hectáreas, unas 20.000 más que la campaña anterior que sumó 580.000 hectáreas.
En el caso del algodón, lo implantado evolucionó normalmente solo, que, en las parcelas con posiciones topográficas bajas, los excesos hídricos provocarían dificultades que se evaluarían oportunamente.
TRIGO
Segunda semana consecutiva en la que el avance de la cosecha del trigo estuvo regulado por la inestabilidad climática, fundamentalmente precipitaciones muy irregulares en las distintas zonas geográficas del centro norte santafesino, lo que ralentizó el movimiento de las cosechadoras por falta de piso y por el contenido de humedad en los granos.
Se logró un progreso del orden del 85 %, con un adelanto intersemanal de 10 puntos y 5 menos, en relación a la campaña anterior, para ambos períodos.
Los rendimientos promedios obtenidos en el período continuaron siendo similares a los del anterior.
MAÍZ TEMPRANO
Los cultivares de maíz temprano nuevamente se beneficiaron por las favorables condiciones ambientales que se produjeron las últimas 4 o 5 semanas, recuperaron sus estados y se los encontró desde bueno a muy buenos.
En el área de estudio se observaron dos zonas bien diferenciadas:
a) en el noreste del SEA, las implantaciones se realizaron en la ventana óptima de siembra y fueron beneficiadas por las lluvias, los cultivos prosiguieron el normal desarrollo de las etapas fenológicas, propias de cada parcela.
b) en el resto de la superficie de estudio, la escasa a nula disponibilidad de agua útil en la cama de siembra, obligó a un corrimiento o desfasaje de 25 a 30 días de la fecha ideal, especialmente en el área de las cuencas lecheras.
ALGODÓN
Dadas las características climáticas del período, el proceso de siembra del algodón estuvo totalmente paralizado, situación que implicó e implicaría un retraso con respecto a los lapsos establecidos por SENASA.
Hasta la fecha se alcanzó, en el:
• sector este algodonero, un avance del 30 %;
• sector oeste algodonero, un avance del 50 %.
La emergencia de la oleaginosa, en las parcelas ya implantadas, se produjo sin inconvenientes, pero en superficies que se anegaron parcialmente, la misma fue difícil y se perdieron plántulas. Se observó a los algodonales en estado bueno a muy bueno, con cultivares excelentes, que aprovecharon satisfactoriamente las condiciones ambientales. Debido al alto grado de humedad y a las elevadas temperaturas, las malezas emergieron rápidamente, por lo que se llevaron a cabo tareas de control.